Agua de lujo: Hasta 80.000 euros por botella
Incluso el agua puede ser lujosa. Un hábito de ricos que ha llevado a diseñadores y estilistas a disfrutar de la creación de botellas de autor y a los productores a buscar aguas con propiedades únicas.
¿Pagarías 80.000 euros por una botella de agua? Pues lo cierto es que hay quienes las fabrican, pero no son una botella cualquiera, sino más bien obras de arte de edición limitadísima hechas con materiales refinados y firmadas por grandes artesanos y artistas, y no solo eso. El universo del lujo ha atraído entre sus terciopelos y oros incluso al producto simple y sencillo por excelencia, el agua.
Desde diamantes hasta Modigliani
El agua más cara se llama Beverly Hills 9OH20 Luxy Collection Diamond Edition y cuesta más de 80 mil euros (100 mil dólares). Una preciadísima creación del joyero Mario Padilla, quien ha colocado hasta 250 diamantes negros y 600 diamantes blancos sobre una base de oro blanco de 14 quilates. Y todo esto para contener 1 litro de agua pura de las montañas de California.
Otro ejemplo llamativo es el de la «Crystal Water tributo a Modigliani», obra del diseñador Paolo di Verachi, quien rindió homenaje al gran artista italiano con una botella chapada en oro de 24 quilates y polvo de oro de 23 quilates. La preciada botella contiene una mezcla de aguas de glaciares islandeses, de Francia y las Islas Fiji, y se subastó en 2010 por unos 50 mil euros (60 mil dólares).
Pero la cosa no termina aquí, existe una amplia oferta de aguas si las comparamos con estas últimas, y sin duda con un precio más más asequible, aunque ciertamente no estén al alcance de todos. Si se deja de lado el prestigio de la botella, y de lo que se trata es de estimular el paladar y la billetera de los adinerados posibles compradores con las propiedades milagrosas del producto, merece la pena destacar el interesante el caso de Kona Nigari, derivada de la desalinización del agua de mar en las profundas aguas de Hawai. La botella se vende por más de 330 euros gracias a sus increíbles propiedades que van desde promover la pérdida de peso hasta reducir el estrés. Entender este tipo de productos no es fácil para la mayoría nosotros, pero lo que representan es un redescubrimiento del mundo del agua. Tanto es así que han nacido figuras profesionales, previamente inimaginables, como por ejemplo el sumiller de aguas. Después de todo, ¿el profundo sentido del lujo no es la exaltación de lo superfluo?
