A los Millennials les de asco la carne cruda
¿Será cierto que a los Millennials les da asco tocar la carne cruda? Pues lamentablemente, parece que sí, al menos eso es lo que ha revelado una encuesta realizada por una de las cadenas de supermercados más grandes de Inglaterra. El descubrimiento ha pillado por sorpresa a los gerentes de la cadena, quienes descubrieron que el 37% de los jóvenes menores de treinta años les impresionaba mucho manejar carne cruda. Por lo tanto, se ha desarrollado un packaging diseñado específicamente para reducir el contacto entre el humano y lo que un día fue un animal.
Millennials demasiado emocionales
Admitámoslo, esto no da una buena impresión, parece que casi se trasmite el mensaje de que las nuevas generaciones están formadas por cobardicas. Sin embargo, cada vez son menos los jóvenes que pasan su tiempo en la cocina, y quienes hacen el esfuerzo están aterrorizados ante la posible contaminación de carne cruda, sobre todo del pollo. Hay quien ha admitido incluso, en varias entrevistas, desinfectar el plato donde apoya la carne para cocinarla antes y después.
Puede que algunos consumidores consideren que un packaging diseñado para los más impresionables podría ser buena idea, aunque para nada justificable cuando se piensa en el desperdicio de plástico adicional, y es aquí donde el problema se torna baste más espinoso. ¿Realmente vale la pena sacrificar valiosos recursos para complacer a unos pocos Millennials tiquismiquis que no pueden sostener un trozo de carne cruda en sus manos? Pues por suerte o por desgracia, esta pregunta se lo están haciendo muchos.
