Helado sin gluten y sin lactosa para auténticos chefs
El helado sin gluten y sin lactosa se puede hacer en casa con el resultado de un verdadero maestro, obteniéndose, entre otras cosas, un producto vegano, sin renunciar a un sabor excelente. Esta sencilla pero ingeniosa receta es una sugerencia de Jamie Oliver, un chef inglés que siempre ha estado muy pendiente de los aspectos relacionados con la dieta vegana y con aquellos que tienen necesidades especiales desde el punto de vista nutricional.
Ingredientes del helado sin gluten y sin lactosa
Estos ingredientes son los recomendados por el chef Jamie Oliver en su receta, pero tened en cuenta que es fácil encontrar sustitutos, utilizando por ejemplo otras bebidas de origen vegetal o un edulcorante distinto. Hay que tener en cuenta que la preparación básica, excluyendo la vainilla, también es adecuada para el uso de otros aromatizantes, sólo hay que hacer algunos experimentos.
- 2 vainas de vainilla
- 400 ml de leche de coco
- 300 ml de leche de soja
- 165 g de jarabe de agave
Cómo elaborar el helado sin gluten y sin lactosa
Comienza con las vainas de vainilla: haz un corte a lo largo de la vaina y usa la punta del cuchillo, o una cucharadita, para retirar la pulpa. No tires las sobras, puede reutilizarlas de forma imaginativa.
Para preparar helados sin gluten y sin lactosa como verdaderos chefs, todo lo que tenéis que hacer es combinar todos los demás ingredientes en un tazón grande, removiendo muy cuidadosamente hasta obtener una mezcla homogénea. Introducir la mezcla en la heladera y dejar que trabaje durante 40 minutos, utilizando una espátula para mover el helado y retirar aquel que se quede en los bordes.
Una vez que se ha terminado el proceso en la heladera, se traslada el helado de vainilla a un recipiente adecuado para el congelador y se deja reposar durante unas horas. De este modo tendréis helado sin gluten y sin lactosa como si lo hubiera hecho un auténtico chef.
La versión sin heladera
El chef Jamie Oliver explicó cómo hacer helados sin gluten y sin lactosa sin utilizar la heladera, y es mucho más fácil de lo que podáis imaginar: una vez que hayas seguido todos los pasos descritos anteriormente, en lugar de la heladera, usa un recipiente para ponerlo en el congelador. Debe permanecer allí durante unas 4 horas, durante las cuales, cada 30 minutos aproximadamente tendréis que remover la mezcla.
