Limones a la parrilla: limonada y otras ideas
En la próxima barbacoa veraniega, ¿por qué no probar con una barbacoa de limones para tomar limonada? Esta idea, que puede parecer un poco extraña en un principio, tiene mucho más sentido de lo que puedas imaginar. Piensa en cómo el sabor de un cítrico cambia durante la cocción: sus aromas se concentran, el jugo pierde algo de su acidez típica y a su sabor clásico se le agregan notas ahumadas. ¿No te apetece probarla?
La limonada a la parrilla
Una vez que el limón esté asado en su interior habrá una serie de reacciones que transformarán el sabor. Y fíjate que el mismo principio, funciona muy bien con todos los cítricos, desde la naranja hasta la lima, pero puedes comenzar con el limón para practicar. Incluso para salsas a base de limón, como por ejemplo la citronette, esta idea funciona bastante bien.
Para prepararlo, solo tienes que asar la cantidad correcta de limones, es decir, 5-6 limones por cada litro de agua que quieras preparar. Queda a tu elección cortarlos por la mitad o en rodajas, pero te recomendamos la primera versión, para no concentrar demasiado la acidez del limón, aunque todo depende de tu amor por el ahumado.
Podrías utilizar la misma estrategia para acompañar pescados, mariscos y algunos tipos de carne, o como alternativa, podrías incluso probar a usar lima para preparar un mojito ahumado.
