La talla de alimentos del maestro japonés del Thaicarving
Crear alimentos tallados requiere de mucho talento, precisión quirúrgica y mucha imaginación, pero es sobre todo la demostración de que se pueden obtener pequeñas creaciones artísticas de frutas y verduras. El llamado «Thaicarving» es de hecho todo un arte y muchos son los artistas callejeros, los cocineros y los apasionados talladores que continúan con esta antigua tradición. Uno de ellos es el japonés Takehiro Kishimoto, cuya cuenta de Instagram es famosa en todo el mundo y seguida por miles de personas.
La historia del antiguo arte tailandés del Thaicarving
La tradición dice que el nacimiento de Thaicarving se remonta al siglo XIV durante la era de la dinastía Sukhothai en Bangkok, Tailandia, y comenzó en el palacio real. Desde entonces ha habido muchos talladores de frutas y verduras que, tanto en Tailandia como en otros países, se han propuesto mantener viva la tradición. El verano pasado en Bangkok, con motivo del cumpleaños de la reina Sirikit, que cumplió 85 años, tuvo lugar un importante campeonato en el que participaron 20 equipos, y que dio vida a búhos, elefantes o intrincados diseños tailandeses en frutas como taros, melones y papayas. Pero el Thaicarving no es solo competición, es ante todo una forma de aprender a relajarse y desarrollar la fantasía.
Takehiro Kishimoto, maestro de la talla y fenómeno viral
La talla de comida es, como siempre ha sido, ampliamente utilizada para ofrendas en el templo o como decoración de bodas, pero los jóvenes, ya sean tailandeses o no, están perdiendo de vista esta práctica milenaria. Para revivir sus viejas glorias y popularidad llegó un chef japonés, Kobu, el cual durante varios años ha practicado Thaicarving con resultados espectaculares, y desde 2016 comparte sus creaciones en Instagram. Es gracias a las redes sociales y a cuentas muy aplaudidas y muy populares a nivel internacional, como es el caso de la suya, que la talla de alimentos no solo sobrevive, sino que se vuelve viral.
A Takehiro Kishimoto le encanta compartir con sus millones de seguidores mini videos, fotos y tutoriales de sus obras maestras comestibles. Se usan muchas frutas y verduras, como rábanos, mangos, cítricos, zanahorias y muchos más, pero su favorito es el aguacate. Como él mismo dice, los tiempos de realización son muy largos, por ejemplo, una hora para el brócoli, dos para el aguacate y tres para la manzana. Los dibujos realizados son a veces personajes de dibujos animados y formas geométricas, pero en su mayoría son patrones inspirados en modelos japoneses tradicionales, o intrincados patrones tejidos en vestidos o, bordados con significados simbólicos.
Una última curiosidad, el chef tallador afirmó que siempre se come su obra de arte una vez que ha terminado. Cómo culparlo, después de todo, es un arte tan extraordinario como efímero y ... sabroso.
