Jardín orgánico: la mejor opción para los niños y los animales
Cultivar un jardín orgánico podría ser la mejor opción para los niños y los animales. La razón es simple: el uso controlado de plaguicidas y otros productos químicos reduce el riesgo de entrar en contacto con compuestos potencialmente nocivos. Pero no es suficiente: organizar un jardín orgánico también significa prestar atención a las variedades que se utilizan, dedicando tiempo a evaluar cualquier toxicidad natural que pueda poner en peligro a vuestras mascotas.
Las ventajas del jardín orgánico
Teniendo en cuenta que para cada producto que decidáis utilizar en el jardín debéis leer la etiqueta cuidadosamente, hay muchos compuestos que son adecuados para un jardín orgánico. Ya busquéis fertilizantes, los más fáciles de encontrar en versión orgánica, o que busquéis pesticidas para el tratamiento de infestaciones concretas, con un poco de "atención es fácil encontrar el producto que mejor se adapte".
Según portales como Pet Poison Helpline, muchos de los plaguicidas e insecticidas en circulación contienen sustancias potencialmente peligrosas para los animales, pero por lo general los síntomas nunca son excesivamente graves, especialmente con una intervención temprana del veterinario.
En cuanto a los niños, es la American Academy of Pediatrics quien habla, y en un artículo titulado Pesticide Exposure in Children aconseja prestar atención cuando se utilizan pesticidas u otros productos químicos en los espacios donde los niños suelen pasar el tiempo.
