¿El alcohol tiene fecha de caducidad?
¿Es cierto que el alcohol tiene fecha de caducidad? La respuesta no es tan sencilla como podríamos pensar: en primer lugar, no todas las bebidas alcohólicas son iguales y además, hay que definir lo que entendemos por «caducidad». Hay bebidas alcohólicas que pueden permanecer intactas durante años, pero una vez que se han abierto deben consumirse con relativa velocidad.
Conocer la fecha de caducidad de bebidas alcohólicas
Como os habíamos anticipado, no todas las bebidas alcohólicas tienen una fecha de caducidad concreta, aunque existen algunas que en la etiqueta tienen indicaciones más específicas. Comenzaremos con lo que podríamos llamar alcoholes básicos, que son aquellos a los que no se les añade azúcar, como la ginebra, el vodka, el ron o el güisqui: se consideran los más estables y, si no se abren y han sido almacenados en las condiciones adecuadas, su durabilidad es indefinida. Una vez abiertos, no tienen una fecha de caducidad precisa, aunque algunos deberían consumirse dentro de un año para poder disfrutar de todas sus propiedades organolépticas.
Entre las bebidas que tienen una fecha algo más concreta se encuentran aquéllas dulces, es decir, a las que se añade azúcar después de la fermentación. En este caso, es fundamental observar la etiqueta del producto y seguir las instrucciones, especialmente después de abrirlo. Por lo general, cuanto mayor sea el contenido de alcohol, mayor será el tiempo de conservación. Cuanto menor sea la cantidad de azúcar, más tiempo se conservará la bebida.
Si hablamos de cremas alcohólicas el discurso cambia totalmente. Estas bebidas suelen contener leche, nata o huevos, ingredientes que pueden deteriorarse más fácilmente. Una vez más, el mejor consejo que os podemos dar es mantener estos licores en la nevera y revisar cuidadosamente la etiqueta. Normalmente, en principio, la duración de estos productos es de unos 12 a 18 meses.
En cualquier caso, la prudencia exige que el alcohol se conserve en un lugar oscuro, seco y fresco, para que no intervengan factores externos que afecten a la caducidad de las bebidas.
